“La justicia, la verdadera justicia, no consiste en el igualitarismo, sino en la equidad o proporción. No en dar a todos lo mismo o en exigir de todos por igual, sino en dar a cada uno según sus talentos.”
San Agustín
Formación en valores
Desarrollar procesos educativos de calidad, de tal manera que nuestra comunidad educativa, fundamentada en los valores del evangelio, se convierta en agente dinamizador del cambio, promueva la justicia, el trabajo productivo, la participación, la solidaridad y la organización, para dar respuesta a las necesidades de la persona, a la realidad de Venezuela y a la vida de la iglesia.
Ofrecer una educación de calidad que desarrolle las competencias básicas en sus estudiantes mediante el enfoque constructivo de aprendizaje significativo, que cuente con docentes motivados y capacitados, con recursos didácticos y tecnológicos, con servicios de apoyo, seguimiento a sus estudiantes, para responder a las necesidades y requerimientos de una educación con pertenencia social.
Nos proponemos
- Ofrecer una enseñanza de calidad.
- Fomentar el desarrollo moral de los estudiantes.
- Propiciar una oferta educativa con estilo pedagógico humanista.
- Desarrollar el enfoque constructivo de aprendizaje significativo.Desarrollar competencias básicas y especificas en los estudiantes.
- Privilegiar las áreas instrumentales (lengua y matemática).
- Formar en valores.
- Intensificar el estudio de una segunda lengua extranjera (ingles).
- Suscitar la participación de todos los miembros de la comunidad educativa y la responsabilidad social corporativa.
El diseño y la implementación de un proyecto educativo distintivo para la Unidad Educativa San Agustín es un objetivo estratégico, que asume, tanto el análisis interno y externo de la educación venezolana como los valores fundamentales de la institución.
Considerando estas premisas, nuestro proyecto educativo se traduce en diversos pilares como sello formativo distintivo, que se proyecta en el quehacer educativo para los próximos años.
Educación de calidad y en valores para la transformación social
Aprender a ser
Para un mejor desarrollo de la propia personalidad y para estar en condiciones de obrar con creciente capacidad de autonomía, de juicio y de responsabilidad personal, se deben utilizar las posibilidades que cada persona posee: memoria, razonamiento, capacidades físicas, aptitudes comunicativas, etc. El estudiante tiene que entender el sentido de si mismo, entender el alcance de sus aspiraciones, de sus triunfos y de sus fracasos. Su meta fundamental es entenderse para poder entender a los demás.
Aprender a conocer
Combinando una cultura general suficientemente amplia con la posibilidad de profundizar los conocimientos en un determinado número de materias. Supone: poder aprovechar las posibilidades que ofrece la educación a lo largo de la vida; apropiarse de herramientas de aprendizaje autónomo; y tener la certeza de que el conocimiento, además de complejo, es dinámico.
Aprender a vivir juntos
La interacción social implica la necesidad de realización personal en el contexto de vida en comunidad de la cual participamos. Con base a lo anterior, el estudiante recibe la preparación conceptual y se le brindan los espacios necesarios para que vivencie los principios constitucionales de participación, democracia y pluralismo en un marco de respeto por la autoridad, la sana vivencia de las normas y una continua búsqueda de la justicia, la paz, la equidad y el respeto por la vida.
Aprender a hacer
Enseñar al estudiante a poner en práctica sus conocimientos, en como cualificarlo para su futuro profesional y, de manera fundamental, a prepararlo para un mercado de trabajo cuya evolución no es totalmente previsible. Corresponde, como principio, actuar en contexto, en concordancia con un planteamiento común a las sociedades desarrolladas o en proceso de desarrollo: como participar en la creación de futuro.